Una sola cosa a la vez

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Una sola cosa la vez, no hay nada tan sencillo de entender ni tan difícil de aplicar Share on X

Una sola cosa a la vez. Centrarte en una sola actividad de forma plena, por sencilla que sea. ¿Eres capaz?

No, no lo eres. Quizás con una actividad, dos pero no más. Vives en un mundo pensado para laminar tu atención de mil y una maneras. Un entorno lleno de elementos que buscan atraer y capitalizar tu atención.

Puede una persona enfrentarse solo al mundo y nadar a contracorriente? Si. Haciendo solo una cosa cada vez.

Pero me acabas de decir que no soy capaz de hacerlo! Y es verdad, no puedes hacerlo.

Tarde o temprano acabarás cayendo pero lo puedes intentar, es más lo tienes que intentarlo. Más que alcanzar la meta o emprender la acción la victoria se obtiene al cambiar la actitud.

No puedes hacer una sola cosa a la vez porque te has educado en el ejercicio de la multitarea de forma continuada. Va más allá de una cuestión de comprensión intelectual. Lees sobre el tema y todos te dicen que mejor focalizar en una actividad a la vez para no dispersarse y así avanzar hacia tu propósito con consistencia.

Estoy seguro que pasas a la acción respetando este principio, afrontando las acciones una a una, capturando y dejando para después lo que va surgiendo. Eres un as de la autogestión, pero hay algo más.

Siempre dejamos la puerta trasera abierta a la interrupción

Trabajar con música o la radio de fondo. Mantener una conversación con un compañero mientras se desarrolla otra cerca de vosotros. Centrarse en la pantalla del ordenador cuando dispones de una ventana al lado que te abre a todo el movimiento de la ciudad …

Capitalizan parte de tu atención a través de tu VAC (vista, audición y capacidad cinestesia) y tú no puedes hacer nada. La percepción del entorno y la captura de información en masa a través de los sentidos forma parte de la naturaleza humana. Es por eso que es imposible hacer una cosa a la vez, por lo menos al 100%.

Es la parte implícita de que no tenemos en cuenta al considerarla como parte de lo normal y por tanto lo ni siquiera lo tenemos en cuenta al actuar o al prepara nuestra actividad.

No quiero parecer un fanático del control pero quiero que entiendas una cosa: Cuando hablamos de trabajar, de hacer las cosas, de resolver… debe haber una voluntad intencional por parte de cada uno de nosotros.

Actuar para crear las condiciones que permitan el desarrollo correcto de la actividad.

Hace mucho tiempo escribí sobre cómo preparar una sesión de trabajo con el fin de sacar el máximo rendimiento a ese par de horas que te reservas para avanzar trabajo o para llevar a cabo esa actividad de alta exigencia.

El escrito sigue este espíritu, pero no es exactamente lo que quiero transmitir.

Edúcate para ser una persona de una sola cosa a la vez

Quiero que trabajes a bajo nivel. Ni cambiar hábitos ni aplicar ninguna técnica, más bien quiero proponerte un experimento para llevarlo a cabo un día a la semana. Cuando quieras, para probarlo y ver qué te pasa.

Durante este día te comprometes a hacer las cosas una tras otra. Una sola cosa a la vez de forma exigente y rígida. Una sola actividad cada vez, por simple y sencilla que sea.

  • Cuando trabajes elige una acción y céntrate en ella plenamente. Sin música de fondo, sin conversación, sin ninguna distracción. Recupera el post sobre preparar las sesiones de trabajo y prepara tu espacio.
  • Cuando hagas un descanso dedícate a una sola actividad. Si tomas café toma café, si haces unos estiramientos haz estiramientos, si caminas un rato, camina un rato sin pensar en nada más. Y ya está.
  • Cuando comas come, sin móvil y sin televisión. Si tienes compañía, alterna la conversación con el acto de comer… En esa momento dedícate en exclusiva a la actividad que hagas, dejando de lado el resto.
  • Cuando leas lee, cuando cocines cocina, cuando mires la TV, mira la TV etc…

Dedícate a tus actividades ordinarias de una en una por insignificantes que sean (escribir una nota, tomar un café, dar una vuelta)

Si trabajas en equipo y no puedes restringir distracciones ambientales o imponer el ritmo que requiere la prueba restringe el experimento en el ámbito doméstico.

Si tienes que alternar más de una actividad intenta ser consciente de la transición entre una y otra, dedicándote plenamente a cada una de ellas.

Utiliza las técnicas para capturar todo lo que se vaya presentando, dejándolo para más tarde para mantener el flujo de actividad.

¿Qué intento con todo esto?

Educar la mente para acostumbrarla a funcionar diferente, suavizando la sensación que nos empuja huir de la tarea actual para saciar nuestra sed de hacer algo más.

A día de hoy cuando dedico tiempo a una actividad como la lectura o la escritura del post semanal sigo necesitando ese algo más. Ruido de fondo, pensar en algo relativo a mi actividad… Estar centrado en una sola actividad de forma prolongada me generaba ansiedad.

En el fondo se trata del mecanismo que nos empuja a generar auto-interrupciones, a boicotear-nos.

Este ejercicio me ayuda a suavizar la resistencia mencionada. A espaciar la aparición de esta sensación eliminando la necesidad de algo más o la sensación de tensión generada por la presión de la actividad.

Una experiencia dedicada a la observación de tu comportamiento y los cambios producidos en al actuar de una forma diferente. Pregúntate si sería tan descabellado hacerlo con más frecuencia, incluso llevarlo a cabo cada día.  Sólo los cambios prolongados en el tiempo crean hábitos y transforman tu rutina.

¿Qué te parece la propuesta?