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Tras dos años de teletrabajo ‘obligado’, la mayoría de las empresas están reincorporando a sus empleados a las oficinas. Está claro es un modelo que ha llegado para quedarse y que muchas empresas, ya por estructura de costes, ya por comodidad de los empleados, mantendrán. 

Aunque nos costó adaptarnos a trabajar en casa, sin salir a reuniones, sin compañeros y sin el jefe al lado, el proceso es ahora el inverso y el estado emocional de los trabajadores se está viendo afectado por las nuevas-viejas rutinas –incluyendo atascos, cafés junto a la máquina, carreras para cumplir los horarios, conciliación…- Desde CVApp.es hemos recopilado algunos consejos tanto para los que ‘van’ como para los que se ‘quedan’:

  • Paz mental: Antes de comenzar a trabajar en las oficinas, es importante comenzar con mente positiva, nada de pensamientos negativos. No vale la pena dedicar tiempo pensando en cómo será la reincorporación a la empresa, no todo es malo. Podrás volver a ver a tus compañeros y retomar proyectos que habían quedado estancados a causa de la pandemia. De hecho, son muchas las empresas que están implementando acertadas políticas de protección de la salud mental de los empleados, especialmente en estos momentos de cambio.
  • Descansa a ratos: Está comprobado que la productividad aumenta si nos tomamos algún respiro para organizar nuestros pensamientos e ideas. Aunque en la oficina la rutina suele ser más intensa en cuanto a reuniones y vigilancia de los jefes, no dudes en hacer pausas similares a las que hacías en casa para sacar al perro o hablar con tu familia. 
  • Organización: Los horarios de trabajo se tuvieron que modificar durante muchos meses, y parecía que ‘todo valía’ –reuniones fuera de horario, terminar ese proyecto con urgencia, cubrir a un compañero…-. Ahora, tanto si vuelves a la oficina como si no, es hora de organizarte y planificarte de manera progresiva y anticipadamente, tanto para el trabajo como para la organización en casa (hijos, tareas domésticas, etc.).
  • Menos reuniones: Aunque sean ‘en casa’ (y mucho más si has de desplazarte a ver a un cliente o a un partner), las reuniones físicas suelen alargarse mucho más que las virtuales. Tratemos de optimizar nuestro tiempo y el de todos reduciendo tanto el número como la duración de éstas para ser más eficientes. Y no dudes en mantener las videollamadas aun desde la oficina, ¡el ahorro de tiempo es enorme!
  • Horarios fijos y rutina: Planifica las tareas todo lo que puedas. Hazlo también con los descansos, y no te saltes ninguno. El aire fresco, literal y metafóricamente hablando, son siempre positivos para la concentración, así que ponlos en tu agenda como una reunión más.
  • Educa a los jefes o a compañeros ‘aspiradora’: No contestes a llamadas del trabajo ni a emails fuera de tu horario laboral. Siempre habrá jefes o compañeros que, por alguna razón, están trabajando más tiempo y tratarán de absorber al resto para justificar su excesiva dedicación o, simplemente, para sentirse menos solos.

Lo ideal, la mayoría coincide, es un modelo mixto, en que empresa y trabajador negocian unos días desde casa y otros desde la oficina, combinando así el trabajo presencial y teletrabajo, para disminuir la ansiedad de algunos empleados. Según un informe de Chartered Institute of Personnel Development (y muchos otros experimentos sociales realizados a lo largo de los últimos años), el trabajo flexible aumenta la fidelización y la motivación de los empleados. El horario ‘fijo’ de nueve a seis está pasado de moda. Por el contrario, dar a los trabajadores la posibilidad de elegir es invertir en su fidelización y asegurarnos de que el trabajo se hará.

El articulo de hoy ha sido escrito por un autor invitado, Rolf Bax, content manager de CVApp.es

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